Comienza con un flash. Un hombre se queda ciego repentinamente cuando conduce del trabajo a casa. De repente, todo su mundo se convierte en una neblina lechosa e inquietante. Una tras otra, cada persona que se cruza –su mujer, su médico, incluso el aparentemente buen samaritano que le lleva a su casa– correrá la misma suerte en un momento dado. A medida que se extiende el contagio y el pánico y la paranoia se apoderan de la ciudad, las víctimas de la ceguera repentina, de “La enfermedad blanca”, son confinados y sometidos a cuarentena en un psiquiátrico abandonado en donde cualquier parecido con la vida normal empieza a desvanecerse.